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Mostrando entradas de diciembre, 2014

Muerte o vida!

Muerte o vida! Denis, es ya un hombre de 23 años, y en su vida, a visto más cosas que muchos en el mundo! en las calles lo ves todo, decía él! Denis, nació y creció en los barrios marginales de Los Angeles de EEUU; desde muy pequeño aprendiz a vivir en la selva de asfalto, como muchos le llaman a vivir luchando y demostrando quien es el mas fuerte o dominante… Creció solo, ya que tenía una familia, que literalmente fue víctima de los constantes enfrentamientos por drogas o territorialismo entre bandas, que generalmente salen heridos o muertos de estos enfrentamientos con armas de fuego o blancas… La calle y los malos “amigos” le enseñaron que para vivir necesitas ser el mas fuerte, el mas mato, el que no le tiene miedo a nada ni nadie, y el que mata sin titubear… De muy joven aprendiz a manejar un sin numero de armas y formas de pelear en la calle, ue convirtiéndose en el mas temido de su zona, y no por ser gentil o amable, sino por derramar sangre y plomo a quien se le en

De verdad, quieres ser infiel?

De verdad, quieres ser infiel? Un hombre llamado Cristian, decidió un día, hacer lo que por siempre había prometido no hacer jamas, ante una multitud de personas, ante un altar, ante Dios! En su mente, justifico sus actos; el machismo y la hombría popular, lo apoyaban, así como muchos de los que se hacían llamar sus “amigos”… Le decían, que una esposa que no valore a un esposo como él! no lo merece! le decían que si ella no se interesa por el, habrá otra que si se interesaría por! que en el mundo en hoy día, existen muchas mujeres, y que no vale la pena sufrir ni aguantar deshonras y desplantes de una! etc… etc… etc… y muchas cosas le decían sus compañeros de tarde en la casa de uno de ellos!  le insistieron, que el matrimonio no vale nada en estos tiempos, que si el no le ha sido infiel a su esposa, que fijo ya ella se los a puesto con otro y el no se ha dado cuenta, porque un hombre no es hombre de una mujer, sino de muchas… y le comentaban que debería de dejar de pensar